Los batidos verdes: una forma sencilla de tomar más frutas y verduras
Los batidos verdes están de moda. No falta "Blogger", "Youtuber" o "Influencer" que no se haya apuntado a la tendencia de comenzar el día con los saludables "smoothies" de color verde intenso. En el post de hoy vamos a ver todos los beneficios que te pueden aportar, cómo se preparan y en qué son diferentes de los tradicionales jugos de frutas o los zumos especiales de los que ya hablamos en nuestra última publicación.
Qué son los batidos verdes
Los batidos verdes, como su nombre indica, no se obtienen como los zumos, licuando frutas o verduras y desechando su pulpa. Muy al contrario, se hacen triturándolas enteras, junto con un líquido añadido.
El color verde se lo deben a una parte de sus ingredientes, que serán siempre vegetales de hoja verde. Estos se acompañarán de diferentes tipos de frutas, además de otros ingredientes opcionales, según la preferencia personal.
El origen
Se considera que la inventora de los batidos verdes es Victoria Boutenko, una ciudadana rusa residente en los Estados Unidos. Su familia sufría de diferentes enfermedades alérgicas y autoinmunes, que Victoria consiguió revertir, en gran parte, gracias a una alimentación basada en un consumo continuado de vegetales crudos.
Sin embargo, con el paso del tiempo se dio cuenta de que sus familiares apenas consumían verduras de hoja verde, porque que no les gustaba su sabor. Para tolerarlos, se veían obligados a usar una gran cantidad de aliños aceitosos, lo que hacía su digestión más pesada.
Buscando alternativas, encontró inspiración en nuestros primos los chimpancés. Observando sus costumbres, se dio cuenta de que estos animales ingerían gran cantidad de plantas verdes, acompañadas de frutas. Además, se pasaban mucho tiempo masticándolas, para facilitar su digestión.
Victoria decidió entonces aplicar el mismo principio, pero sustituyendo el tedioso paso de masticar las plantas por la potencia de su batidora y añadiendo algo de agua para convertirlo todo en una bebida. Habían nacido los batidos verdes.
Los resultados sobre la salud de Victoria y su familia fueron impresionantes. Tanto es así que decidió compartir su éxito con el mundo mediante libros y charlas informativas, actividades que sigue desarrollando hasta el día de hoy.
Ventajas de los batidos verdes
Es posible que estés pensando: "ya como regularmente frutas y verduras." "¿Entonces qué pueden aportarme, adicionalmente, los batidos verdes?" Tienen una serie de importantes ventajas:
- Muy fáciles de tomar. Es muy difícil que te comas varias porciones de frutas y verduras de una sentada. Sin embargo, con un simple "smoothie" esto resulta realmente sencillo. Es además una solución ideal para personas con aversión a "lo verde" o que comen pocas frutas y verduras.
- Totalmente portátiles. Puedes llevar tus batidos verdes a cualquier parte en un simple tarro, botella de cristal o termo.
- Super energéticos. Los nutrientes se encuentran en los smoothies en forma altamente concentrada. Están además "pre-masticados", lo que permite que tu cuerpo absorba rápidamente las vitaminas y los minerales. Esto provoca un auténtico "subidón" de energía. En este sentido, los batidos verdes son una excelente alternativa a las bebidas excitantes como el café o el té.
- Mejor digestión. Frente a los zumos, en los que se desecha la pulpa de las frutas y verduras, los batidos verdes mantienen toda su fibra. Esto ayuda a un mejor tránsito intestinal y a una digestión lenta y saludable.
- Poder antioxidante. Los vegetales de hoja verde contienen altas concentraciones de sustancias beneficiosas para la salud, tales como clorofila o polifenoles. Estos compuestos tienen un alto poder antioxidante, que frena el envejecimiento de las células. También ayuda a prevenir las enfermedades degenerativas y el cáncer.
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Refuerzo del sistema inmunitario. El consumo de vegetales variados es muy importante para mantener una flora intestinal sana. Esta a su vez resulta clave para que nuestras defensas funcionen correctamente ante agresiones exteriores y para que no se comporten de manera errática causándonos alergias y enfermedades autoinmunes. Tomar regularmente batidos verdes puede contribuir de forma notable a aumentar esa necesaria variedad.
Cómo hacer el Smoothie perfecto
Hacer batidos verdes no tiene mayor dificultad. Todo el secreto está en usar los ingredientes correctos en las proporciones adecuadas. Aunque existen diferentes formas de prepararlos, la siguiente es una de las que dan mejor resultado:
Paso 1: Líquido
Pon unos 250 a 300 ml (2 tazas) de agua en tu batidora. Alternativamente, también puedes experimentar con otros líquidos como alguna bebida vegetal (leche de almendra, avena o soja, por ejemplo) o incluso té o zumo de frutas. Sólo recuerda que este último contiene mucho azúcar, por lo que no es ideal para usarlo todos los días.
Paso 2: Vegetales verdes
Añade alrededor de 150 grs (1 taza) de vegetales de hoja verde troceados. Cuanto más variados sean mejor. Algunos ejemplos de lo que puedes usar:
- Verduras cultivadas como espinacas, acelgas, col rizada, kalé… No uses verduras duras como por ejemplo brócoli.
- Brotes tiernos de plantas como alfalfa, berros, brócoli, trébol rojo, etc.
- Hierbas aromáticas frescas como albahaca, perejil, eneldo, etc.
- Vegetales silvestres o semi-silvestres para ensaladas como rúcula, canónigos, diente de león…
- Hojas comestibles de raíces como remolachas, rabanitos o zanahorias (sólo las hojas, no la hortaliza en sí).
- En menor medida, ya que contienen muchos menos nutrientes, también puedes usar lechuga u otros tipos de ensalada.
Tritura durante 1 a 2 minutos, hasta obtener un líquido homogéneo.
Paso 3: Frutas
Ahora completa tu smoothie con diferentes frutas troceadas. La proporción ideal, si estás empezando en el mundo de los smoothies, es aproximadamente de 3 partes de fruta por 1 parte de hojas verdes. A medida que te vayas acostumbrando a su sabor, puedes poco a poco ir aumentando la proporción de vegetales verdes.
¿Y qué frutas usar?
Lo importante es que la parte principal (al menos 2/3 partes de las que pongas) sean frutas con textura cremosa y sabor dulce. Ideales para ello son el plátano, la papaya, el mango o albaricoques y melocotones. La parte restante la puedes completar con otro tipo de frutas como, por ejemplo, cítricos (naranja, mandarina), fresas, bayas (arándanos, moras, frambuesas) o cualquier otro tipo que te guste.
Vuelve a triturarlo todo hasta obtener una textura y un color homogéneos. Si el smoothie te queda muy espeso, puedes añadir un poco más líquido y volver a triturar.
Paso 4: Extras (opcional)
Si quieres preparar batidos verdes todavía más nutritivos o suculentos, puedes añadirles algunos extras. Buenas opciones pueden ser algunas semillas como las de Chía, Calabaza o girasol. También puedes agregarles una cucharadita de algún superalimento en polvo o de proteína vegetal. Incluso, puedes incorporarles una cucharada de copos de avena o de trigo de sarraceno.
Si te gusta más dulce, existe la opción de triturar algunos dátiles o frutas deshidratadas (orejones, ciruelas, etc.) con tu batido. Hay también quién añade endulzantes, pero nosotros te aconsejaríamos que trates de evitarlo. Ten en cuenta que las frutas ya contienen suficientes azúcares, por lo que no será saludable que añadas más. Si no puedes imaginarte tu smoothie sin endulzantes, trata al menos de ir reduciendo poco a poco la cantidad añadida, para que tu paladar se vaya acostumbrando.
Trucos útiles
Para lograr unos batidos verdes perfectos y con todas sus propiedades intactas es conveniente que conozcas algunos trucos que te ayudarán a conseguirlo.
En primer lugar, es altamente recomendable que siempre uses frutas y verduras de cultivo ecológico. De lo contrario, estarás ingiriendo pesticidas y químicos que pueden tener un efecto negativo sobre tu flora intestinal y tu salud en general. La verdura bío además suele ser más rica en nutrientes, por lo que el beneficio será doble.
Trata de no batir los ingredientes más tiempo del necesario. Con el rozamiento se calentarán y pueden verse mermadas algunas de sus propiedades. Si vas a hacerte batidos verdes a diario, tal vez te convendría invertir en una batidora de alta gama. Con este tipo de aparatos puedes agregar todos los ingredientes a la vez y tener tu smoothie listo en un tiempo mucho más corto, generalmente entre 30 segundos a un minuto.
Si te gusta tomarlo frío, la mejor manera es meter la parte de las frutas cremosas, ya troceadas, al congelador la noche anterior. Esto es preferible a añadir hielo, ya que a las batidoras convencionales les cuesta triturarlo.
También es importante que sepas que, cuando masticamos los alimentos, la salivación cumple una función importante en la digestión. Por un lado, determinadas enzimas que tenemos en la saliva ayudan a pre-digerir los alimentos. Por otro, envían señales al resto del sistema digestivo, para que esté preparado para recibir el alimento.
Al ser los batidos verdes una bebida, este proceso no se produce si te lo bebes de golpe. Por ello, es muy recomendable que lo muevas por tu boca durante algunos instantes para salivar, antes de tragarlo. Esto mejorará la digestión y hará que puedas absorber más nutrientes.
Hacer batidos verdes es sencillo
Ahora que conoces las técnicas básicas, ya no debería serte difícil prepararte smoothies deliciosos y saludables. Usando los ingredientes adecuados en su correcta proporción, en realidad poco puede fallar.
Así que no tengas miedo de experimentar y atrévete a comenzar el día con este alimento tan saludable y fácil de preparar. Y si tienes prisa, simplemente llévatelo a dónde vayas. Así te resultará fácil tomar tu dosis de fruta y verdura diaria, aunque tengas una vida ajetreada.
¿Tienes alguna preferencia para tus batidos verdes o has logrado crear el smoothie con el sabor más sublime?
¡Entonces no dudes en compartir con nosotros tu receta favorita!