Alimentar el cerebro correctamente durante la época de estudios es muy importante. Especialmente cuando llegan los exámenes finales.

Es el todo por el todo, la recta final, el último esfuerzo…

Te preguntarás: ¿Qué puedo comer para rendir al máximo, para tener más memoria y capacidad de retención? ¿Qué debo evitar para no desconcentrarme y volver a olvidar lo estudiado? ¿Puedo hacer algo para evitar estos molestas distracciones?

Para empezar, un estudiante no tiene la labor de descargar palés de un camión, ni de mover pesados muebles como los trabajadores de empresas de mudanzas. Tampoco entrena su cuerpo 8 horas diarias como los deportistas de élite.

Su objetivo es mantener la mente abierta, despejada y atenta a la vez que focalizada. Para lograrlo, es importante que siga las siguientes pautas:

Cosas que debe evitar un estudiante

Alcohol

Sus efectos son de sobra conocidos y, así como pueden ser ideales para socializar, no lo son para rendir durante los exámenes.

Azúcar blanco y otros endulzantes

Tienen un efecto similar al del alcohol, aunque no tan exagerado. Como lo consumimos tan habitualmente y desde nuestros primeros meses de vida, no somos conscientes de cuanto nos desconcentran. Hay que tener en cuenta, que gran parte del azúcar lo consumimos de forma indirecta: en cereales de desayuno, salsas, pan, mermeladas o conservas. Podemos sustituirlo por melazas de cereales, que son parecidos a la miel, estevia o concentrados de frutas (parecen siropes). De hecho, un buen remedio para “desconectar” después de una jornada de estudio es prepararte una infusión relajante y ponerla al fuego con un poco de melaza de arroz. Puedes añadirle también una cucharadita de kuzu, previamente disuelta en agua fría. Calienta la mezcla hasta que el kuzu se disuelva y espese un poco la bebida.

Comer deprisa y demasiada cantidad

Comer mucho o muy rápido puede sobrecargar el sistema digestivo y nos producirá somnolencia. Esto tendrá como consecuencia que nuestro cuerpo nos pedirá más una siesta, que ponernos delante de los libros y apuntes.

Comer para alimentar el cerebro

¿Qué debes entonces comer a diario, si eres estudiante, para alimentar el cerebro y dar lo mejor de ti en los exámenes? Estos son algunos de los alimentos más recomendables:

  • Cereales enteros en grano. Especialmente adecuados son el mijo, la avena y arroz integral o semintegral. Si algún día tienes mucha prisa, puedes cocinarte pasta integral de estos mismos cereales.
  • Legumbres. ¡No un super plato de fabada o callos, eh! Una pequeña cantidad es lo más recomendable.
  • Verduras dulces. Cebolla, puerro, cebolleta, zanahoria, calabaza, repollo, lombarda, remolacha, patatas…
  • Frutos secos o semillas. Un puñado al día es una cantidad razonable.
  • Pescado o aves. Siempre en cantidades pequeñas y de cría ecológica.

   

Ejemplo de menú diario para alimentar el cerebro

DESAYUNO

Zumo recién licuado de zanahoria + fruta de temporada + jengibre Copos de avena cocidos con pasas+manzana troceada+ralladura de limón y servir con semillas o frutos secos (o espolvorear con alguna de las mezclas de la marca Linwoods) y un chorro de leche vegetal.

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COMIDA

Crema de zanahoria Ensalada de arroz integral+garbanzos+aceitunas+hojas verdes+espárragos a la plancha+pesto Infusión de anís, manzanilla y regaliz de Josenea o alguna similar.

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CENA

Pescado blanco cocido con patatas y guisantes aliñado con aceite de oliva extra virgen extra Calabaza al horno con canela Además, es muy cómodo tener en casa patés para picar entre horas. Lo ideal sería hacerlos nosotros/as, pero si no tenemos tiempo, hay marcas como Pan do Mar, Vegetalia o Alecosor que los comercializan y son de excelente calidad. Suelen estar hechos con pocos ingredientes, así que siempre puedes guardar las etiquetas y tratar de emularlos en casa cuando te apetezca.

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¡Feliz estudio y no te olvides de alimentar el cerebro con buenos alimentos bio!