¿Sabías que las algas comestibles tienen muchísimas propiedades saludables?

Si tu relación con ellas hasta a ahora se ha limitado a que se te enreden en los pies cuando estás en la playa o si has oído hablar de ellas, pero no te acabas de animar a probarlas, este post es para ti.

Te vamos a contar todas sus maravillosas propiedades y las múltiples formas que existen de consumirlas y usarlas en tu cocina.

Qué son las algas

Podríamos decir que las algas son las plantas más antiguas, ya que existían antes de que se formara un manto vegetal en tierra. Se calcula que existen alrededor de 45.000 especies que son muy diferentes entre sí.

Algunas son de agua dulce y otras viven en el mar. Las hay que alcanzan tamaños considerables, mientras otras son organismos unicelulares.

Al igual que los vegetales en tierra, realizan la fotosíntesis. De hecho, se calcula que aportan alrededor del 50% del oxígeno del planeta.

Existen muchas especies de algas comestibles, que además tienen interesantes características nutritivas.

Propiedades de las algas

Las algas, aparte de ser un alimento muy nutritivo, tienen muchísimas propiedades beneficiosas. Tanto es así que casi podríamos darles la consideración de un superalimento.

Estas son algunos de los beneficios que se esconden en las algas comestibles:

  • Son muy ricas en minerales, especialmente hierro, calcio y yodo. También aportan cantidades nada despreciables de fósforo, potasio y magnesio.
  • Incluyen muchas vitaminas, principalmente de los grupos A, B (a excepción de la B12), C, D, E y K.
  • Aportan proteínas de calidad, ya que contienen todos los aminoácidos esenciales en buenas cantidades, así como otros adicionales no esenciales.
  • Al tratarse de plantas, también presentan una buena cantidad de fibra alimentaria.
  • Son muy bajas en grasa, por lo que no engordan.
  • Los carbohidratos que contienen son de tipo complejo, lo que evita que tengan consecuencias negativas sobre el nivel de azúcar en sangre.
  • Tienen efectos depurativos sobre nuestros órganos internos, ayudándonos a eliminar metales pesados y otras toxinas.
  • Ayudan a reducir la acidificación que se produce en nuestra sangre y nuestras células por un consumo excesivo de azúcares y productos procesados. Por ello, son un ingrediente esencial de la cocina alcalina.

Las algas comestibles no son sólo un alimento muy completo, con múltiples propiedades. Presentan además una combinación perfecta entre proteínas, vitaminas, fibra y minerales, lo que hace que estos nutrientes puedan ser fácilmente absorbidos por nuestro organismo.

Presentaciones comerciales

Las algas comestibles normalmente se ofrecen en alguna de las siguientes presentaciones:

  • Deshidratadas. Es quizás la opción más práctica, ya que ocupan poco espacio y pueden almacenarse durante mucho tiempo sin que pierdan propiedades. A la hora de consumirlas bastará rehidratarlas con agua. Algunas variedades se pueden consumir crudas, mientras que otras necesitarán una ligera cocción. Debes tener en cuenta que ganarán mucho en volumen, por lo que sólo necesitarás una cantidad pequeña.
  • En polvo. Son también algas comestibles deshidratadas, que se han molido posteriormente. Se usan sobre todo como sazonador para ensaladas, como sustitutivo de la sal. No hace falta rehidratarlas.
  • En conserva. Algunos tipos de algas se venden en latas de conserva o frascos de cristal. Sólo tendrás que enjuagarlas y estarán listas para consumir.
  • Frescas en sal. En este caso vienen conservadas con sal, de forma parecida a las anchoas. Tendrás que enjuagarles la sal y después las podrás consumir inmediatamente.
  • En cápsulas. Algunas microalgas como la Chlorella o la Spirulina, por su pequeño tamaño, se comercializan en cápsulas, como suplemento alimenticio.
  • Mezcladas con otros productos. Es muy habitual también encontrar productos envasados que contienen algas deshidratadas, como por ejemplo risottos, patés, etc.

La importancia de la moderación

Como has podido comprobar, las algas comestibles tienen muchísimas propiedades beneficiosas. Esto podría animarte a utilizarlas en grandes cantidades, lo que no está exento de peligros.

Debes tener en cuenta que la concentración de minerales en las algas es muy elevada, por lo que con una dosis muy pequeña tendremos prácticamente cubierta nuestra necesidad diaria de muchos de ellos.

Excederse en mucho de las cantidades recomendadas puede ser peligroso. Sobre todo, porque las algas contienen gran cantidad de yodo, lo que podría llegar a alterar nuestro sistema tiroideo.

Lo mismo ocurre con los otros minerales que pueden afectar negativamente a nuestros órganos internos, si los consumimos en dosis demasiado elevadas. Por ello debes ver las algas más como un suplemento alimenticio o superalimento.

Es recomendable que te fijes en la cantidad de yodo, si esta viene indicada en el envase. Procura no superar los 0,2 miligramos por día.

Prácticamente no existe yodo en otros alimentos, por lo que te será fácil controlarlo. Eso sí, si cocinas con sal yodada, tendrías que incluir esas cantidades en el cálculo.

No obstante, si consumes algas comestibles con frecuencia es mejor que utilices una sal sin yodo añadido. En nuestra sección de condimentos, podrás encontrar diferentes tipos de sales naturales, como por ejemplo la sal del Himalaya, que es de máxima calidad.

Aunque la cantidad de yodo y minerales varían ligeramente en cada tipo de alga, puedes tomar como una regla aproximada no añadir más de una cucharadita de café de algas a tus guisos y no consumirlas más de 2 o 3 veces a la semana. Si tienes problemas de hipertiroidismo, deberías evitarlas.

Algas comestibles ecológicas

Otro punto muy importante es que las algas que consumas procedan de un productor de confianza. Como comentado anteriormente, estos organismos acuáticos ayudan a absorber metales pesados y toxinas.

Lamentablemente actúan de la misma manera en el océano y pueden llegar a acumular concentraciones importantes de estos metales, si han crecido en aguas contaminadas.

Por ello, es importante que cuando compres algas comestibles, estas procedan de productores ecológicamente certificados y de preferencia nacionales. Esto te garantizará que se hayan cultivado de forma sostenible y en aguas limpias.

Estarán además sometidas a rigurosos controles. Tras el desastre nuclear de Fukushima, esto se ha vuelto aún más importante, ya que muchos productos relacionados con las algas proceden de Japón, donde actualmente el riesgo de contaminación radiactiva es mayor.

En nuestra tienda virtual podrás encontrar un buen surtido de algas comestibles de nuestros productores gallegos Algamar y Portomuiños.

algas Portomuiñosalgamar

Anímate a probar las algas

Después de todo lo que hemos visto, seguro que ya tienes claro que las algas pueden hacer mucho por tu salud. Dales una oportunidad e inclúyelas en tu despensa.

¡No te pierdas este superalimento del mar!