El invierno está dando sus últimos coletazos y al fin llega la deseada primavera. La naturaleza despierta, florecen los almendros y el zumbido de los insectos anuncia que un año más se repetirá el ciclo de la vida.

Empiezan los días en que podrás volver a disfrutar de los paseos al atardecer y realizar actividades al aire libre.

¡Si no fuera por las temidas alergias primaverales que amenazan con aguarte la fiesta!

Ya te ves de nuevo rascándote, con ese horrible picor de ojos y estornudando sin parar…

Sin embargo, hay muchas cosas que puedes hacer, mediante tu alimentación, para mitigar estos desagradables síntomas. Una nutrición adecuada puede servir para prevenir o incluso revertir determinados tipos de alergias.

Aquí vamos a revelarte las principales claves de la alimentación anti-alérgena. Así mismo, te ayudaremos a entender mejor por qué se producen las alergias y qué puedes hacer parar prevenirlas o combatirlas.

El origen de las alergias

En las últimas décadas, se ha multiplicado por diez el número de personas que sufren algún tipo de alergia. Tanto es así, que se estima que ya está afectada más del 30% de la población mundial.

¿Pero qué es realmente una alergia y por qué se produce?

A grandes rasgos, podríamos decir que se trata de un error de nuestro sistema inmunológico. Este está pensado para repeler ataques de patógenos como bacterias, virus u hongos.

Cuando sufres una alergia, ocurre que tus defensas se ceban, por error, con algún agente externo totalmente inofensivo. Esto puede ser un grano de polen, el polvo o los pelos de tu mascota.

En el proceso de combatir a ese enemigo imaginario, tu organismo produce diferentes tipos de anticuerpos. Estos generan a su vez una serie de sustancias inflamatorias como la histamina, que se depositan en células de defensa especiales llamadas mastocitos.

El problema, es que estas se encuentran principalmente en unas partes de tu cuerpo especialmente sensibles: las mucosas

Y ya te imaginarás en qué se traduce ese despliegue de histaminas en tus mucosas.

¡Exacto, lo has adivinado!

En picor, lagrimeo, secreciones y estornudos. Por así decirlo, estás siendo víctima del "fuego amigo" de tus propias defensas.

Por que se descontrola el sistema inmune

¿Pero, por qué se produce esta reacción desproporcionada de tu sistema inmune? Hay que decir que, si bien determinadas alergias pueden ser de tipo hereditario, el incremento espectacular de estas en las últimas décadas tiene mucho que con los cambios en nuestra alimentación y estilo de vida.

La salud de nuestro sistema inmunológico, está íntimamente relacionada con el buen estado de nuestros órganos digestivos, especialmente la llamada "flora intestinal".

En ella existe un delicado equilibrio mediante el cual las bacterias "beneficiosas" mantienen a raya a otras que, de proliferar en exceso, podrían resultar peligrosas. También inhiben el crecimiento de hongos y levaduras.

Si este equilibrio se trastoca, tu intestino se volverá permeable a las materias de desecho y los patógenos, que se filtrarán a tu sangre.

Esto hará que tu sistema inmunitario se vea desbordado. Tendrá que luchar contra muchas amenazas simultáneamente, lo que provocará que actúe de forma errática e imprevisible.

Viene a ser como un soldado al que están atacando por todos los lados y, en pleno estrés de combate, acaba disparando a cualquier cosa que se mueva. Exactamente igual como cuando tus defensas acaban ensañándose con un inocente grano de polen.

Causas de las alergias

¿Pero cuáles son las causas que alteran nuestra flora intestinal, fomentando el desarrollo de alergias? Estas son las principales:

  • Mala alimentación. El exceso de azúcares, harinas refinadas y grasas saturadas acidifican tu organismo y provocan inflamación. Debilitan tu flora intestinal y sobrecargan tu sistema inmune.
  • Tóxicos. La contaminación ambiental, los pesticidas y tóxicos en los alimentos y productos del hogar, suponen una pesada carga que tu cuerpo tendrá que tratar de desintoxicar.
  • Antibióticos y medicamentos. Muchas medicinas, especialmente los antibióticos, causan estragos entre tus bacterias beneficiosas. Estos daños, a la larga, pueden acabar debilitando tu sistema inmunológico.
  • Estrés y ansiedad. Es bien conocido que una situación continuada de estrés agota las defensas y fomenta la proliferación de alergias. De hecho, muchas erupciones cutáneas tienen un origen nervioso.

Queda por lo tanto claro, que muchas de las alergias que sufrimos tienen su causa en unos hábitos de vida poco saludables. Estos comprometen nuestras defensas, las cuales finalmente acaban volviéndose en nuestra contra.

Como prevenir las alergias

Reestablecer tu salud intestinal será siempre el primer paso para poder prevenir las alergias y mitigar las ya existentes. Para ello, te recomendamos que sigas los siguientes pasos:

Desintoxica tu organismo

Reduce al máximo tu exposición a los tóxicos consumiendo productos ecológicos. Incluye en tu dieta alimentos depurativos y desintoxicantes como las algas (especialmente la chlorella y la spirulina) u otros que sean ricos en clorofila.

Las hierbas de trigo o cebada, ya sea tomadas como jugo o suplemento, son depurativos excelentes. Pueden ayudarte también diferentes infusiones como el cardo mariano o la cola de caballo.

Sigue una alimentación alcalina

Evita alimentos acidificantes, que contengan azúcares, harinas refinadas, hidratos de carbono simples o grasas saturadas.

Apuesta por los vegetales de hoja verde, las coles y las crucíferas (brócoli, coliflor, etc.). Regala protagonismo a los ajos, las cebollas, los aguacates y los limones. También son alcalinizantes raíces como el jengibre y la cúrcuma.

Para que conserven todas sus propiedades, lo ideal es que comas estos alimentos crudos. También puedes incluirlos en batidos verdes o smoothies.

Regenera tus probióticos

Incluye en tu dieta alimentos fermentados, como el chucrut, el kimchi, el tempeh, el miso, el yogur o el kéfir. Es importante que estos productos no estén pasteurizados, para que no se destruyan sus cepas de probióticos beneficiosas.

Refuerza tu sistema inmunitario

Además de seguir una alimentación adecuada, puedes reforzar aún más tus defensas con algunos superalimentos. La maca o la equinácea pueden ser buenas opciones.

También puede beneficiarte el consumo de cítricos y de setas como la shiitake y, sobre todo, la reishi.

Remedios específicos para mitigar las alergias

Siguiendo las recomendaciones anteriores, reducirás de forma importante las probabilidades de sufrir alergias primaverales y de otro tipo.

¿Pero qué hacer mientras tu organismo se regenera o si ya padeces de una alergia y lo estás pasando mal?

Por fortuna, existen también toda una serie de plantas y alimentos que pueden mitigar esos molestos síntomas y ayudarte a sobrellevarlos mejor. Estos son algunos de los más eficaces.

  • Cardo Mariano. Tomado como infusión, hemos visto ya que es un excelente depurativo. Pero además, se ha demostrado como un muy eficaz antihistamínico, que ayudará a reducir tu reacción alérgica.
  • Ajos y cebollas. Ambos son conocidos por sus efectos descongestionantes. Puedes añadir algún ajo crudo a tus ensaladas o prepararte una tostada con ajo negro, el cual es mucho menos fuerte de sabor. En cuanto a la cebolla, un remedio muy efectivo es partirla en rodajas y dejarla en un vaso con agua por unas ocho horas. Después, desecha la cebolla y bébete el líquido. El sabor es tan horroroso como te imaginas, pero comprobarás cómo mejoran tus síntomas de la alergia.
  • Ortiga. La ortiga es un excelente antiinflamatorio, que calma las irritaciones en las mucosas. Ayuda además a controlar las histaminas. Puedes preparártela como infusión.
  • Aceite de perilla. La perilla japónica o shisho, es una hoja aromática asiática, de sabor muy fuerte. Es utilizada en la cocina japonesa. De ella se extrae un aceite, que es muy eficaz contra todo tipo de manifestaciones alérgicas. Ayuda a aliviar la rinitis alérgica y las inflamaciones de las mucosas. También tiene un efecto calmante en todo tipo de problemas de piel, desde eczemas a dermatitis y urticarias. Incluso reduce la incidencia de alergias graves como el asma.

Si quieres saber más sobre los diferentes remedios naturales para las alergias, te recomendamos el libro del mismo nombre, escrito por Rosa Guerrero.

Tus armas contra las alergias

Hemos visto, por lo tanto, que para prevenir las alergias y reducir sus síntomas debes fortalecer tu sistema inmunitario.

Para ello, te recomendamos, en primer lugar, que sigas una dieta desintoxicante y depurativa para limpiar tu organismo de toxinas y desechos.

Después, comenzarás a regenerar tu flora intestinal con una alimentación alcalina y rica en probióticos. Puedes además fortalecer tus defensas tomando algunos suplementos o superalimentos indicados para ello.

Por último, si a pesar de todo esto todavía sufres el ataque de alguna alergia, puedes recurrir a remedios naturales eficaces para reducir sus síntomas. Así lograrás que la primavera no se convierta en un calvario para ti y podrás disfrutar al máximo de esta maravillosa estación que está por llegar.